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Reinarán olvidados

La magia cuesta la gracia,
camina turbado,
ciego,
cansado,
el agua se acaba,
despierta sediento,
se cansa en la noche,
junto a la aplastada caja,
más austera,
su corazón crece,
tiembla el tirano,
vacío que se derrumba,
abandona la tierra,
crece la grama,
colorida y fuerte,
arde el fuego,
se quema el tótem,
reinarán olvidados,
el vórtice se mueve,
feroz,
vuelan las máscaras,
las traga la niebla,
en tierra de Baco,
se derrama de vino,
ya no está ebrio,
ahora está desnudo,
sin miedo,
así gira su mundo,
para un rumbo nuevo.

Honra la vida

Honra tu vida,
sacando belleza de la cotidianidad,
transforma tu circunstancia en creación,
somos creadores no repetidores,
que importa el caos si lo reformas,
cual alquimista,
luz que cura tu sombra,
fuego que quema tu mente,
dolor que la abre,
placer que la serena,
tu corazón late laxo,
sin tiempo.

Pétalos de mar

Otra flor se mueve,
otro tiempo llueve,
la trae el viento
llorando un lamento,
su perfume envuelve,
su misterio asciende,
mi luz se enciende,
se sumerge en el agua,
con sus pétalos flota,
hacia el mar se aleja,
en su corazón refleja
tanta incertidumbre,
se hunde y se moja,
pero con mis piernas
corro por la arena
con mis brazos en alto,
llego hasta la orilla
y veo sus semillas,
me clavo en el agua
como un salva vidas,
braseando voy las olas
contra la marea,
siguiendo su aroma
la veo a lo lejos,
me acerco nadando,
ya casi llegando,
la tomo en mis manos,
la huelo profundo,
hasta darle un beso,
descubrí el presente,
aflojé los dientes,
la solté de nuevo,
pude ver el cielo,
una ola me tumba,
vuelvo hasta la orilla,
veo más semillas,
todo en un segundo,
puedo ver el mundo,
dentro de mi palmo.

A mi padrino que se fue

Cuando el gélido Julio golpea mis sienes,
cuando lúcido y limpio arrebato los versos,
cuando el alma me ruge drenando mis penas,
cuando el cielo se abre y el reloj se apaga,
pienso sin tiempo tu noble semblanza,
tus días labrando entregado a tus nietos,
regalando amor sin esperar más nada,
peleando la vida y burlando la suerte,
sabio y tenaz calentando las charlas,
escucho tus cuentos en sollozo lamento,
te fuiste en invierno a cosechar las nubes,
un poeta está triste agarrado a la tierra,
reservame un lugar entre el cielo caliente,
llegaré chiflando y desafiando la muerte.

Oscura luz de mar

Ya no se como encender
esa llama que se apaga,
busco la chispa que avive,
pero crepita y se va.

Los espíritus no escuchan
ni te conmueve mi sal,
el cuanto es muy pequeño,
mas infinito el azar.

La espuma se desparrama,
va decorando el mar,
mucha agua y poco fuego,
otra vez me voy a ahogar.

Trago agua y rasco el fondo,
contra la corriente voy,
el dolor que hoy me atrapa,
mañana me hará mejor.

No te quedes en mis brazos
si tu corazón no late,
dejo mi puente extendido,
y te suelto en un instante.

Si te suelto me libero,
puedo seguir nadando,
la poesía me cicatriza,
aunque te siga soñando.

Cáscara y sin jugo

Hay muchos libros, pero poca literatura.
Hay mucho ritmo, pero poca armonía.
Hay mucho chiste, pero poco humor.
Hay mucho entretenimiento, pero poco arte.
Hay muchas leyes, pero poca justicia.
Hay muchos timoneles, pero pocos remeros.
Hay muchos políticos, pero pocos servidores.
Hay muchos discursos, pero poca abnegación.
Hay mucha información, pero poca meditación.
Hay mucha publicidad, pero poca comunicación.
Hay mucha sensiblería, pero poca sensibilidad.
Hay muchos encuentros, pero poco amor.

Aquel día

Un día,
la lucha se hizo guerra,
el orgullo violencia,
la determinación ansiedad
y el amor un tormento.

Otro día,
la ansiedad se hizo tiempo,
la violencia perdón,
la guerra leyenda
y el tormento amor.

Porque aquel día,
tus abrazos fueron ciertos,
tu sabor más sabroso,
tu canción más profunda
y mi sueño eterno.

Conquistador sin patria

Encantador y astuto con alma de vagabundo,
ronronea sus libertades y dotes de presentir;
de sofisticados sentidos y mirada trasnochada,
va cazando roedores y esquivando cascabeles.
Mahoma lo acunó llevándolo al paraíso,
siendo testigo discreto en misterios del Islam.

Orina su territorio celoso de compartir,
cae siempre bien parado con astucia y liviandad.

Hace más de diez milenios tu maullido se hace oír
y en Egipto matan hombres por violar tu pedigrí.

Tu piel es muy codiciada, monederos de poder,
esconden tesoros grandes pero no se dejan ver.

Paciente y observador compartimos un pensar,
aunque seamos distintos, las ratas nos huelen mal.