Una crónica sin Dios

Sórdido ámbito para el prestigio,
tautológico, retórico y retorcido;
de dictadores fieles.

Fidelidad, ¿buena o mala?,
según las circunstancias,
lo bueno es malo, y lo malo, bueno.

Amor propio que aúlla,
resiente a través de la certeza,
para negaciones paganas.

La burla de Dios,
ignorancia y temor,
vibran acordes.

Identidad desesperada
busca ciega aprobación,
sempiterna y obstinada.

Megalómanos peligrosos,
influencia y obsesión,
energía enferma.

Pleonasmos mediáticos
que vituperan almas
y exudan caras lociones.

El mismo panteón bajo otras flores,
otro rebaño del mismo pastor.

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